Culto a Apolo: 'El que hiere de lejos'
Historia de Apolo
Apolo es el hermano gemelo de Artemisa e hijo de los dioses Zeus y Leto. Es el dios de los atletas, la adivinación y la música. En cuanto a sus relaciones sentimentales, Apolo se ha negado en repetidas ocasiones a contraer matrimonio, pero tiene numerosos amantes, tantos hombres como mujeres. Durante su juventud, Apolo fue un joven impulsivo que mató a muchas criaturas y tomó por la fuerza lo que quiso, como los Templos de Oráculos de la diosa Gea. Tras recibir una cura de humildad impuesta por Zeus, se volvió un ser comedido y predicó la moderación entre sus seguidores. Sus frases más célebres son “Nada en demasía” y “Conócete a ti mismo”.
Aunque muy parecidos físicamente, Apolo es claramente superior en dones a su hermana (por no hablar de su superioridad moral), y quizás la prueba más palpable de ello es que es capaz de volar a pesar de no poseer alas, poder que su hermana nunca ha desarrollado. Sin duda, el objeto que mejor define a Apolo es su arco mágico hecho de oro confeccionado por Hefesto. Otro de sus símbolos predilectos es el Sol, con el que tiene una conexión especial y del que se ayuda para ver todo lo que ocurre durante el día en la tierra.
Descripción de Apolo
Guapo, esbelto y atlético, Apolo aparenta entre 16 y 18 años. Tiene los ojos como el cielo despejado y sus cabellos ensortijados son del color del oro. Sus facciones son perfectas y proporcionadas hasta establecer el canon de belleza masculina. Apolo acostumbra a ir desnudo (costumbre entre los atletas de la Hélade) o como mucho con una capa abierta o un calzón. Su personalidad es comedida, contemplativa, y sumisa ante los deseos de Zeus. Apolo es un perfeccionista en todo lo que hace, y su nivel de exigencia consigo mismo es casi ilimitado. Aunque a menudo finja desinterés por las cosas que pasan a su alrededor, su increíble ego le hace pensar que todo lo que sucede está relacionado con su persona, y antepone siempre sus necesidades a las de los demás, aunque es suficientemente inteligente como pasa saber que su bienestar personal pasa por tener contento a Zeus en todo momento.
Seguidores de Apolo
Los apolíneos (como son conocidos) se caracterizan por su mesura y por llevar una vida dedicada a la perfección del propio cuerpo. Suelen invertir su tiempo en gimnasios, en practicar la caza o en las artes, pero rara vez tienen un verdadero trabajo. Acostumbran a vestir ropajes que les permitan libertad de movimientos, como armaduras de cuero o lino, siendo habitual encontrarlos desnudos mientras compiten. Su relación con otras personas acostumbra a ser cordial, aunque comedida, y si bien es cierto que es común verlos en eventos sociales, es normal que se retiren pronto a descansar y no cometan excesos. Tienden a ser un tanto soberbios y ególatras; la modestia no suele ser su mejor virtud. Los sacerdotes de Apolo, debido a sus múltiples facetas, han conseguido ganarse algunas de las posiciones más relevantes en los devenires de muchos Estados. Visten túnicas blancas con capuchas y bordados en oro. Mientras que los sacerdotes comunes se dedican a honrar al dios y a hacer los respectivos rituales de sacrificio antes de celebrar cualquier competición deportiva de envergadura, los oráculos aconsejan a los hombres, desde comerciantes a reyes, sobre qué elecciones deben tomar en sus vidas. No menor es la influencia de los seguidores de Asclepio (médicos, físicos, sanadores), a los que todos los que pueden permitírselo recurren cuando la vida de sus seres queridos corre peligro. Los sacerdotes de Apolo son libres de casarse y tener familia propia, aunque muchos eligen seguir el ejemplo de su dios y permanecer solteros de por vida, alternando a sus amantes de ambos sexos.
Atributos típicos en los seguidores de Apolo
Características altas: AGI, APA y SEN | Habilidades: Medicina [Diagnóstico, Tratamiento], Atletismo [Todas], Armas D [Arco], Intuición [Adivinación], Artes [Todas], Cosmología [Todas] | Rasgos Sociales: Epíteto, Influencia.
Arquetipos comunes en los seguidores de Apolo
Atletas: hombres jóvenes normalmente de familia noble que han decidido consagrar su vida a la perfección del cuerpo físico. Suelen pasar los días entrenando en los gimnasios, y viajan muchos kilómetros para enfrentarse con sus iguales en las competiciones deportivas que se celebran en distintas ciudades. El mayor honor que puede recibir un atleta es ser designado por su polis para representarla en los Juegos Olímpicos.
Tetes: (arqueros de guerra). Hombres libres o nobles que forman una de las divisiones presentes en casi todos los ejércitos de la Hélade compuestas por filas de arqueros.
Cazadores: hombres que dedican su vida a dar muerte a otras criaturas. A veces para comer su carne, otras para librar el mundo de los monstruos que lo asolan.
Artistas: hombres que han sido bendecidos con el don de la creatividad y cuya misión es traer al mundo la belleza artística y el entretenimiento.
Adivinos: aquellos que han sido bendecidos con el don de la profecía son los intermediarios naturales entre los hombres y los designios de los dioses. También tienen el poder de ver el futuro.
Sanadores: el imperfecto cuerpo de los mortales tiende a estropearse. Los seguidores del dios Asclepio, hijo predilecto de Apolo, han aprendido los misterios del cuerpo humano para retrasar la muerte.
Nobles rústicos: hombres de alta alcurnia que viven en el campo, alejados de las polis. Suelen dedicar su vida a la caza y a practicar deportes. Viven bajo el amparo del sol y corren a sus casas cuando cae la noche.